El colegio Santa Mª de Gracia persigue alcanzar unos objetivos como centro educativo no sólo de excelencia académica, sino que también nos planteamos ambiciosas metas en la formación moral, ética y religiosa de nuestros alumnos. Por ello, proponemos una educación que favorece la construcción de la propia identidad, apuesta por la diversidad y apoya la autonomía personal y la responsabilidad social.
Favorecemos la enseñanza personalizada, despertando las capacidades individuales y respetando el ritmo de cada alumno, para que ellos sean participes de su propia educación.
Como Centro Educativo, queremos formar íntegramente a todos los alumnos desarrollando todas sus capacidades fomentando su espíritu.
Como Centro Católico, ofrecemos una cultura humana y transmitimos una educación cristiana que viva personalmente y comunitariamente la fe.
Como Centro Agustiniano. educamos para el estudio, la reflexión, y la interioridad haciendo del alumno una persona libre y responsable.
Estimular una pedagogía activa donde el alumno se sienta y sea el protagonista de su aprendizaje, favoreciendo su iniciativa y creatividad.
Los alumnos, verdaderos protagonistas de su propia educación, deben participar activamente en el desarrollo y crecimiento de la Comunidad Educativa con su implicación personal y académica.
Los padres de alumnos son los primeros educadores de sus hijos y participan en el Centro activa y responsablemente.
La Asociación de padres de alumnos promueve la participación y orienta sus esfuerzos en apoyo de la tarea colegial. Cuidan especialmente del clima del Centro.
Los profesores son parte fundamental de la comunidad educativa. Promueven y animan la acción educativa global y la participación a través de los Órganos Unipersonales y Colegiados como miembros también de la
El personal no docente, administración y servicios aporta su colaboración propia
La Entidad Titular que dirige el Centro, establece su identidad y garantiza los principios que definen el tipo de educación es la Comunidad Religiosa.
Para que un centro funcione como una auténtica Comunidad Educativa, es necesario que todos sus miembros quieran trabajar solidariamente, compartiendo el objetivo de lograr una mejora en la calidad de la educación en su ámbito concreto de actuación. Sin esa voluntad compartida, no existe propiamente una Comunidad Educativa. La Comunidad Educativa en nuestro centro es considerada como una gran familia formada por los siguientes integrantes:
Para que un centro funcione como una auténtica Comunidad Educativa, es necesario que todos sus miembros quieran trabajar solidariamente, compartiendo el objetivo de lograr una mejora en la calidad de la educación en su ámbito concreto de actuación. Sin esa voluntad compartida, no existe propiamente una Comunidad Educativa. La Comunidad Educativa en nuestro centro es considerada como una gran familia formada por los siguientes integrantes:
Para que un centro funcione como una auténtica Comunidad Educativa, es necesario que todos sus miembros quieran trabajar solidariamente, compartiendo el objetivo de lograr una mejora en la calidad de la educación en su ámbito concreto de actuación. Sin esa voluntad compartida, no existe propiamente una Comunidad Educativa. La Comunidad Educativa en nuestro centro es considerada como una gran familia formada por los siguientes integrantes:
A nadie le faltan fuerzas, lo que a muchísimos les falta es voluntad - Victor Hugo -